Renacen en tu boca madreselvas, declamando un mensaje de esperanza de paz y de prosperidad, tu mirada todo se viste de exquisita seda la insigne gala para un presente tan gris, quien pudiera ser ajeno a esta revés que la vida destina sonrisas vanas para algunas mejillas y cascadas de auténticos sinsabores para los que ahora ya son ajenos a tu vida, los mismos con los que empatizabas cuando la vida les sonreía.
Te hallaste envuelto sin ninguna necesidad en una tesitura donde tuviste que escoger entre la cara o la cruz y tú optaste por el anverso, una postura algo lógica y esperada y al mismo tiempo incongruente de ti. Tu doble moral se esconde por el rubor de saber, que en lo cierto se encuentra callada la razón.
QUE BUENAS REFLEXIONES JOSE ME GUASTA MUCNHO
ResponderEliminar